Cierre de Temporada en Aguilón: Entre Profundidades y el Monte de Alcalñiejo
Con la actividad de este pasado fin de semana en las tierras de Aguilón, ponemos el broche de oro al calendario de actividades de este año. No podemos ocultar nuestra satisfacción: cerramos el ciclo anual con el corazón contento y, lo más importante, con la tranquilidad de haber completado todos nuestros retos sin ningún incidente. Ha sido un año de compañerismo, seguridad y mucha montaña que no podría haber terminado mejor.
Espeleología: El binomio Onsa - Ajo Frío
El grupo de espeleología tuvo una jornada intensa explorando el subsuelo de la zona. La aventura comenzó en la Cueva Onsa,
donde el famoso paso del "sacacorchos" en la entrada les obligó a demostrar su agilidad antes de alcanzar la belleza de la Sala de la Rana.
Pero la jornada no terminó ahí. El equipo completó la actividad visitando la Cueva de Ajo Frío. Esta cavidad aportó el contrapunto perfecto: si la Onsa destaca por sus formas caprichosas, Ajo Frío es significativa por su amplitud y su carácter laberíntico. Es una cueva que impresiona por sus techos altos
en ciertas zonas y, sobre todo, por ser un punto clave de estudio arqueológico en la región, recordándonos que estos lugares fueron refugios naturales hace miles de años. El contraste entre la estrechez técnica de la primera y la atmósfera solemne de Ajo Frío hizo las delicias de todos los participantes.
Plan B: Senderismo por el Monte de Alcalñiejo
Para quienes prefirieron disfrutar de la luz del sol y las vistas panorámicas, se organizó un Plan B de excepción: la ruta conocida como el Monte de Alcalñiejo.
Este recorrido circular es una de las joyas del entorno de Aguilón. El grupo de senderistas pudo disfrutar de:
Vistas Estratégicas: El ascenso al monte ofrece una perspectiva privilegiada de la cuenca del Huerva y las formaciones de piedra caliza que caracterizan esta comarca.
Entorno Natural: La ruta atraviesa zonas de monte bajo y matorral mediterráneo, donde el silencio solo se rompe por el vuelo de las grandes rapaces que habitan los cortados cercanos.
Unión de Barrancos: El trazado permitió conectar los paisajes del Barranco de la Onsa con las zonas más altas, ofreciendo una andada variada y muy reconfortante para despedir el año.
Un grupo unido, un año excelente
La participación fue, una vez más, el motor de la jornada. Ver a los dos grupos —espeleólogos y senderistas— reencontrarse al final del día para compartir las experiencias del "arriba" y el "abajo" es la esencia de nuestro club.
Cerramos el año con la mochila llena de recuerdos y la mirada puesta en el nuevo calendario. ¡Gracias a todos los socios por vuestra prudencia, vuestra energía y vuestra pasión!









