Una bonita ruta y muy fácil de realizar para pasar la mañana del domingo.
Partimos desde el parkig habilitado en el embalse de Vadiello y atravesamos unos túneles excavados en la roca para enlazar por una pista muy ancha y a continuación con un sendero salpicado de ermitas, algunas muy deterioradas por el paso de los siglos, la primera que nos encontramos la mas importare y mejor conservada es la de S. Cosme y S. Damián. Lo que mas nos llama la atención es la cantidad de madroños que nos podemos encontrar por el camino, no nos podemos resistir a probar sus frutos ya maduros que hacen la delicia de nuestro paladar, seguimos la marcha pasando por un esconjugadero y tras algunas construcciones ruinosas llegamos a la Fuensanta, una ermita con fuente donde parar a calmar la sed y sentarse a la sombra en días muy calurosos, el agua es limpia y cristalina como nos lo demuestran los tritones que jugueteaban sumergidos en sus pozas, estos anfibios solo sobreviven en un habitad libre de contaminación, continuamos por un precioso y sombrío bosque de robles que nos depositara a los pies del huevo de S. Cosme, un mayo de piedra y arcillas que desde su base se yergue altivo e imponente y desafiante para cualquiera que se atreva a escalarlo, después de un descanso para reponer fuerzas continuamos camino para cerrar la circular y poner punto final a esta atractiva excursión.
