7 nov 2016

Ainielle_30-10-2016

Si en algún sitio tiene un sentido especial esa estación que lo llena todo de colores amarillos, ocres y rojos....de contrastes, de un correr de hojas secas, como un último aliento de vida previo al intermedio del invierno es en Ainielle. El pueblo que popularizó Julio Llamazares en su libro en el que relata a modo de monologo los últimos días de Andrés, el que fuera su último habitante.

Lentamente, las horas van pasando y la
lluvia amarilla va borrando la sombra
del tejado de Bescós y el círculo infinito
de la luna. Es la misma de todos los
otoños. La misma que sepulta las casas y
las tumbas...........

Nos vamos, hasta Olivan para tomar el sendero que va a Bergusa y continua hasta Ainielle.
Encontramos el bosque en una maravillosa explosión de color, os dejamos unos fotos para que lo disfrutéis con nosotros.
















Ahora nos vamos, pero volveremos pronto con el relato de una nueva excursión.

¡¡ Hasta la próxima!!